Es una experiencia que nos reporta malestar, sensación de fastidio y dolor. Surge cuando no están en sintonía nuestra necesidad de estimulación y lo que estamos percibiendo del entorno. Se produce una inadecuación entre esa necesidad de estimulación y lo que nos ofrece la realidad presente, y se traduce en la sensación de falta de significado. (View Highlight)
Sería lo ideal, el aburrimiento en sí mismo debería cumplir con una función, pero no siempre la podremos cumplir. La función es la de señalar que estamos empleando energía en una actividad que para nosotros no tiene valor. (View Highlight)
Gracias a que lo experimentamos a través del malestar, del dolor, recibimos ese mensaje de “estoy aquí invirtiendo mi tiempo, mi energía, en algo que para mí realmente no es significativo, algo que no me estimula adecuadamente, algo que estoy perdiendo el tiempo y gastando tontamente mi energía”. En el momento en el que nosotros recibimos este mensaje tenemos la opción de reaccionar frente a esto para tratar de huir del malestar. (View Highlight)
Diseñando una estrategia de huida, es decir, implementando, imaginando un cambio frente a la situación presente y poniéndolo en práctica. Ahora bien, existen circunstancias en las que el aburrimiento no puede cumplir con esta función. (View Highlight)
Por ejemplo, cuando somos conscientes de que nos estamos aburriendo, pero somos incapaces de imaginar un escenario más deseable. Ya sea por falta de creatividad, por un trastorno de la personalidad o porque esos recursos no se encuentran disponibles. (View Highlight)
Sí, o cuando somos perfectamente capaces de saber qué nos gustaría estar haciendo en lugar de lo que nos está despertando aburrimiento, pero no podemos poner en práctica ninguna estrategia de huida. (View Highlight)
Son dos fenómenos completamente distintos y hasta me atrevería a decir que opuestos. Piensa que si uno está sin hacer nada, está descansando porque así se lo autoprescribe para reconectar con sus propios pensamientos o para no hacer nada. (View Highlight)
“El aburrimiento lo que te señala son estados en los que no deseas permanecer”. (View Highlight)
Mientras tú estás en ese momento, estás disfrutando, estás sintiendo bienestar. Es justo lo contrario del aburrimiento. Es decir, ese momento en el que tú te tumbas en el sofá y, por ejemplo, te pones a dormir. (View Highlight)
Mientras no te cause malestar, no está relacionado con el aburrimiento, porque tú deseas permanecer en ese estado. El aburrimiento lo que te señala son estados en los que no deseas permanecer. (View Highlight)
El aburrimiento simplemente implica producir un cambio, pero ese cambio no tiene por qué ser ni original, ni innovador, ni completamente desconocido. A veces creamos una opción totalmente nueva, pero la gran mayoría de las veces recurrimos una y otra vez a lo que ya conocemos. (View Highlight)
Siempre vamos a tener que salir del aburrimiento, pero esto tiene varios matices. Yo lo que no recomiendo es autoinfligirse aburrimiento. Y no confundir los términos; aburrirse no es lo mismo que descansar. (View Highlight)
La gran mayoría de las veces que sentimos aburrimiento, es cuando estamos haciendo cosas por obligación, y no cuando estamos en nuestro tiempo de ocio o descansando. (View Highlight)
Cuando nos estamos aburriendo, como lo que queremos es huir de ese aburrimiento de la forma más rápida posible, dejamos que no medie ese proceso reflexivo. No estamos realmente atentos y no pasamos por ese proceso de detenernos a pensar por qué nos estamos aburriendo. (View Highlight)
Para mí tolerar el aburrimiento significa que en lugar de dejar que sea el cerebro siempre el que decida por nosotros, adoptar una actitud un poquito más hipervigilante. (View Highlight)
Es decir, vamos a centrarnos en el momento en el que estemos experimentando, vamos a tratar de identificar la causa y vamos a tratar de desplegar conscientemente, aunque esto conlleve un gasto energético, cuáles son nuestras opciones más exitosas a largo plazo para dejar de aburrirnos. (View Highlight)
Claro, si realmente queremos hacer del aburrimiento algo mejor, tenemos que pasar por esa fase de pensar. De pensar qué nos lo genera y de pensar cómo queremos evitarlo. Y claro, pensar también es muy doloroso. ¿Por qué? (View Highlight)
Porque conlleva un ejercicio de reevaluación, de tomar conciencia de uno mismo, de cuáles son mis expectativas, de qué es lo que yo deseo, qué no estoy haciendo bien, qué sí estoy haciendo bien, qué me está aportando el entorno en el que me encuentro… Digamos, es un ejercicio de leerte a ti mismo la cartilla. (View Highlight)
“El aburrimiento es una experiencia puramente subjetiva” (View Highlight)
Cada uno de nosotros tiene una demanda de estimulación completamente distinta. Cada persona es distinta. Esto está determinado por factores genéticos, biológicos, ambientales, educativos, sociales… Es decir, la propia sociedad a veces también marca cuál tiene que ser nuestra necesidad de estimulación. Una misma actividad a ti te puede parecer sobreestimulante y a mí me puede parecer hipoestimulante. De manera que, claro, el aburrimiento es una experiencia puramente subjetiva. (View Highlight)
Sí, es distinto. Ambos son grupos etarios que se aburren mucho, pero por cuestiones diferentes. Los jóvenes y adultos por ejemplo nos encontramos en un momento de cumplir con ciertas metas profesionales y personales. Estamos en una carrera que tiene un ritmo vertiginoso, ¿no? Nos aburrimos menos. (View Highlight)
Los niños en cambio se aburren enseguida de todo; se dan cuenta de que hay infinidad de opciones para llenar ese catálogo y por tanto, no quieren quedarse con tres o cuatro opciones. Quieren verlas todas antes de empezar a decidir qué es lo que realmente a ellos les hace sentir que están ocupando su tiempo de forma significativa. (View Highlight)
Si el niño no tiene esa orientación (si no le ofrecemos un catálogo de opciones), va a desarrollar estrategias frente al aburrimiento. Pero no todas ellas te van a gustar. No todas ellas van a ser adaptativas. Cuando una de esas estrategias se traduzca en consumir drogas, en fumar porros, no te va a gustar nada. (View Highlight)
Y te arrepentirás de no haber pasado más tiempo con él y de dedicarle ese tiempo a orientarle hacia respuestas que a ti te parezca que son valiosas, que están en línea con tus valores, etc. (View Highlight)
No culpo a los padres actuales de querer aferrarse a ese tipo de eslóganes. Porque les dan un respiro, les descargan la conciencia. ¿Por qué? Pues porque trabajamos todo el día, trabajamos los dos. No tenemos tiempo para nada, ni fuerza, ni ganas. (View Highlight)
Sí, efectivamente, por paradójico que pueda parecer. El hecho de probarlo todo hace que también se aburran fácilmente de aquellas cosas que ya han probado, porque quieren cosas nuevas, quieren nuevos estímulos, quieren seguir explorando, y es lo lógico y está muy bien que sea así. (View Highlight)
“Esta es mi opción para llenar el tiempo”, y es cuando llegan las adicciones en la adolescencia y la edad adulta. Es muy importante que, aunque estemos cansados, como padres, sigamos impulsando esa creatividad. No esperes que el niño vaya a la estantería a buscar un libro; el niño va a inventar mil trastadas, y no todas ellas te van a gustar. (View Highlight)
Son personas que han tenido mucho tiempo para pensar qué les gusta y qué no, de manera que tienen un catálogo muy reducido, pero muy bien construido. (View Highlight)
Pero, en el momento en el que los sucesos vitales les empiezan a afectar, esto afecta a ese catálogo (los hijos se marchan de casa, te sientes más aislado, pierdes movilidad…). Y una de las opciones de tu catálogo ya deja de estar disponible. Y al mismo tiempo las personas mayores están menos predispuestas a introducir opciones nuevas a partir de cierto momento. (View Highlight)
No es lo mismo que lo haga mi pareja, pero ellos son niños. Queremos que sean autónomo pero no que tomen decisiones para las que no tienen herramientas aún para tomarlas. (View Highlight)
Completamente, para llegar a ese punto tienes que hacer los deberes socráticos de conocerte a ti mismo y los deberes kantianos, de atreverte a pensar. Es la forma de seguir madurando de una forma saludable. (View Highlight)
Hay momentos de aburrimiento cortos en los que no se te permite nada, por ejemplo estás en la parada del metro, tienes diez minutos, pues ahí te viene bien llamar a alguien, entrar en las redes, ver un vídeo en Youtube… (View Highlight)
Está maravilloso. Soy la última que demonizaría la tecnología o las redes sociales. Pero considero que construir una relación sana con el aburrimiento tiene que pasar siempre por este proceso reflexivo, tiene que pasar por el pensar, no hay otra opción. (View Highlight)
No hay que tener tanto miedo a evaluarse a uno mismo. No pasa nada si te estas equivocando, esa es tu oportunidad de reconducirlo, pero si siempre alivias el aburrimiento por la vía fácil, siempre te tomas “la píldora”, al final te volverás a ver abocado a esa situación de aburrimiento una y otra vez. (View Highlight)