Llevo sosteniendo desde al menos hace dos años la paradójica situación de que Europa y Estados Unidos jamás habrían permitido que la URSS comprara una cadena de televisión en su territorio, pero lo estaban haciendo con Tiktok y China. Dos argumentos se han esgrimido en EEUU para que una empresa que en última instancia debería obedecer al gobierno del partido comunista controlara lo que consume el joven (y cada vez más el adulto): que forma parte de la libertad de información en una sociedad liberal y que quien quiso prohibirlo fue Donald Trump. (View Highlight)
El tema vuelve a estar sobre la mesa. El presidente Biden dice que firmará el proyecto de ley si es aprobado por el Congreso, que exige a ByteDance desinvertir TikTok. Es decir, la aplicación podrá seguir pero sólo si cambia de dueño. Uno nuevo que no sea chino, claro. Un aspecto llamativo de esta posición es que como candidato utiliza la plataforma para su campaña (Deepa Shivaram en NPR, en inglés). (View Highlight)
Quien también parece girar posiciones es Donald Trump, que ahora argumenta que la prohibición de TikTok beneficiaría a Meta, que suspendió sus cuentas de Trump Facebook e Instagram, las cuales fueron restablecidas el año pasado. Demetri Sevastopulo en FT (en inglés). (View Highlight)
La reacción de Tiktok ha sido la de de mostrar un mensaje a sus usuarios estadounidenses pidiéndoles que se pronuncien contra la prohibición de la app, explica Esther Lastra en Marketing Directo. El popup incluye el número de teléfono del congresista más cercano. Como explica Lulu Cheng la estrategia les podría explotar en la cara: es una muestra de su poder de alcance y su influencia utilizados para su propio beneficio, justo lo que los congresistas estadounidenses no quieren en manos chinas. (View Highlight)
los entrevistadores juzgan la adecuación comparando a los candidatos con ellos mismos. El estudio muestra que los candidatos a los bufetes de abogados, bancos y consultoras de élite “encajan bien culturalmente” si tienen aficiones, estilos y experiencias universitarias similares a las de sus entrevistadores (View Highlight)
El estudio está lleno de hallazgos. La “prueba del avión” se convierte en un heurístico para evaluar la compatibilidad cultural. Los evaluadores prefieren candidatos con los que se sentirían cómodos estando “atrapados en un aeropuerto”. Por tanto es la conversación inicial informal la clave para identificar similitudes culturales. Me cruzaba con este tuit de César Astudillo y con ello tenía otro punto de vista: el “encaje” ( ese”cultural fit”) minimiza el conflicto y aumenta la tasa de éxito de la contratación, pero engendra monoculturas discriminatorias y favorece el pensamiento de rebaño. En cierta medida lo que los entrevistadores buscan la mayoría de las veces discriminar. (View Highlight)
La demanda china de gelatina está diezmando las poblaciones de burros en África, lo que ha llevado a las autoridades a frenar las exportaciones de estos animales. Las pieles de burro han sido codiciadas durante mucho tiempo en China por su uso en medicinas tradicionales y productos de belleza de lujo, que se generalizaron a medida que aumentaban los ingresos en el país. Elian Peltier, Keith Bradsher y Siyi Zhao en NYT en español. (View Highlight)
